martes, 9 de mayo de 2017

Sergio Obando, un personaje ambiental

Sergio tarda cuatro horas en elaborar un bolso. Tejer una cesta para ropa le toma, aproximadamente, una semana.

Con este titular, el periódico impreso de la Corporación Autónoma Regional (CAR) destacó a Sergio Obando Hurtado, un joven de 22 años de edad, técnico en Manejo Ambiental, quien desarrolló un proyecto productivo amigable con el medio ambiente, a partir de materiales reciclados. 

Sergio nació en Soacha, y actualmente vive Pasuncha, una inspección del municipio de Pacho (Cundinamarca). Aprendió, desde niño, la habilidad para elaborar artículos con las bolsas plásticas recicladas, destreza adquirida a través de Niños Defensores del Agua, un programa de la CAR que incentiva y promueve hábitos y prácticas ambientales desde los hogares, a través de la implementación de un proceso educativo que involucra el uso del recurso hídrico y la transformación de la cultura ambiental en el territorio. 

“Cuando terminé mi etapa lectiva me dijeron que debía conseguir una empresa dónde realizar la etapa práctica. Consulté si la podía hacer en mi pequeña empresa, creada desde cuando tenía 12 años de edad. Así pude continuar con mi proyecto productivo, el cual fortalecí con el aprendizaje adquirido en el SENA”, cuenta. 

Este emprendedor recorre diferentes lugares, con la idea de ofrecer sus productos, elaborados de forma artesanal. Bolsos, balones, tapetes, mochilas, sandalias, vestidos, manillas, portalápices, papeleras, alcancías, cinturones, llaveros, calabazas, sombreros, individuales, banderas y floreros son algunos de ellos. 

“Los artículos que más vendo son los bolsos y los balones. El principal mercado lo encuentro en las ferias ambientales, a las cuales van muchas personas con conciencia ecológica, dispuestas a apoyar esta iniciativa de sensibilización con nuestro planeta”, agrega. 

Este artista, en uno de los apartes del periódico ComuniCAR, es descrito como poseedor de unas delicadas manos, que juntan, doblan, trenzan las envolturas de papel para convertirlas en polígonos, cuadrados y triángulos, entre otras multicolores formas. 

“Con una destreza asombrosa, pero sobre todo con mucha paciencia, Sergio Obando va transformando las bolsas y los paquetes, que rescató de la basura, en preciosas piezas de artesanía, el arte reciclado que ha permitido a este muchacho convertirse en un ejemplo para la comunidad”, dice el artículo. 

A corto plazo, Sergio planea ampliar su negocio para generar más empleo. Actualmente, un primo, a quien él le enseñó sus habilidades manuales, le ayuda los fines de semana en la elaboración de algunos productos, en su taller ubicado Pacho, lugar en el cual vive con sus padres y sus seis hermanos. 

“El reconocimiento a nuestros aprendices nos motiva a continuar realizando nuestra labor con calidad y pertinencia, construyendo las bases para una sociedad creativa y en armonía con el medio ambiente”, puntualiza el subdirector del Centro Industrial y de Desarrollo Empresarial del SENA en Soacha, Roberto Prieto Ladino. 

Para Sergio, el SENA es su casa. Cada mes va a su centro de formación, en Soacha, donde se graduó en 2014. Allí ofrece sus productos y a la vez recoge los insumos que los aprendices reciclan, como parte de un proceso de inmersión en la cultura medioambiental que él no sólo admira, sino representa.